Otra Objeción

(Another Objection)

Algunos tienen otra objeción en contra de que el rapto ocurrirá cerca o al final de la tribulación usando la base bíblica que dice que el justo nunca será castigado con el injusto, dando como prueba los pasajes que hablan de Noé, Lot y los israelitas en Egipto.

Ciertamente tenemos una buena razón para creer que el justo no sufrirá la ira de Dios durante los siete años de tribulación, pues esto contrastaría con tantos precedentes bíblicos y promesas (ver, por ejemplo, 1 Tesalonicenses 1:9-10; 5:8).

Sin embargo, Jesús dijo que el justo sufriría en el tiempo de la gran tribulación. No será en las manos de Dios, pero sí en las manos de los injustos. Los cristianos no están exentos de la persecución—a ellos se les promete persecución. Durante los siete años de tribulación, muchos creyentes perderán sus vidas (ver Mateo 24:9; Apocalipsis 6:9-11; 13:15; 16:5-6; 17:6; 18:24; 19:2). Muchos serán decapitados (ver Apocalipsis 20:4).

Por esto, si cada creyente en cierta nación es mártir, nada podrá prevenir la venida de la ira de Dios sobre toda la nación. Y ciertamente, si hay creyentes dentro de una nación, Dios es capaz de protegerlos de Sus juicios, en tanto caen en manos de los injustos. Durante sus juicios en el tiempo de Moisés, Dios probó eso. Dios ni siquiera permitió que un perro ladrara en contra de un israelita, mientras que juicio tras juicio caía sobre los egipcios vecinos (ver Éxodo 11:7). De la misma manera, leemos en el libro de Apocalipsis de langostas que llegarán a la tierra para atormentar a los perdidos por cinco meses, pero no se les permite atormentar a los 144,000 siervos judíos que serán sellados con una marca especial en sus frentes (ver Apocalipsis 9:1-11).